Descripción |
El lienzo representa en la parte superior a un santo franciscano que sostiene una copa con un dragón. A su lado, en el ángulo superior derecho, aparecen la Virgen con el Niño, sentada sobre un templo y en el lado opuesto el Niño Jesús. En la parte inferior aparecen dos figuras orantes, arrodilladas. Se trata probablemente de los comitentes del cuadro, vestidos a la moda española del primer tercio del siglo XVII.
El lienzo procede de la colección de José del Madrazo, que registró el cuadro como un cuadro de devoción a San Francisco, atribuido a Francisco Pacheco. Juan Cabré anota el lienzo en el inventario de 1924 en los mismos términos. No obstante, Sanz Pastor identifica en 1955 al santo monje en el catálogo sistemático de la colección del Museo Cerralbo. Ella reconoció a San Jacobo de la Marca, canonizado en 1726. Representado, por ejemplo, también por Zurbarán, se reconoce al venerable franciscano por el cáliz con el dragón. El atributo alude a un atentado que sufrió el monje, al que intentaron envenenar con el vino de la liturgia.
Respecto a la atribución a Pacheco, maestro de Diego Velázquez y autor del importante tratado de El arte de pintar, es preciso mencionar que Enrique Valdivieso y Juan Miguel Serrera ponen en tela de juicio la antigua atribución. La consideran obra anónima en el libro sobre la Pintura sevillana del primer tercio del siglo XVII.
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